viernes, 15 de febrero de 2008

Bumerán a la estrategia anti inflación


La aceleración en el crecimiento del gasto y los posibles recortes impositivos pueden convertirse en un cóctel que se presente fuerte para la estrategia de contener las presiones inflacionarias. Incluso -aunque parece un contrasentido- los propios paquetes fiscales para contener precios administrados y de algunos alimentos pueden tener un efecto bumerán sobre la inflación.


Es que tanto las posibles mejoras en el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (ver nota aparte) y los paquetes de baja tarifaria suponen un aumento en el ingreso disponible de las personas.

Aunque es difícil desaprobar esas decisiones, el análisis de los técnicos del Banco Central sostiene que son acciones que dan más aire a las presiones inflacionarias.

Las personas que cuentan con más dinero porque la cuenta de UTE le llegó con menos importe o, hipotéticamente, porque deban pagar menos impuesto a la renta volcarían ese excedente al consumo y no al ahorro.

Aunque el Central reforzó su política contractiva desde el último trimestre del año pasado subiendo las tasas de referencia, los rendimientos que pagan los depósitos están lejos de seducir a las personas para ahorrar en lugar de seguir comprando bienes y servicios.

La expansión del gasto público es otro elemento que analistas, empresarios y técnicos ven como un elemento que va en contra de frenar la inflación. Es posible que el Ministerio de Economía le dé más importancia a no sobreajustar la economía a que la inflación siga bordeando por arriba el techo del rango.

En los últimos meses desde Economía se asegura que el gasto público está bajo control y que casi no crece como porcentaje del Producto Interno.

Esto no es visto igual por analistas y empresarios que ya ven como la discusión técnica pierde fuerza ante el avance de los tiempos electorales.

Fuente: El País, 15 de febrero

No hay comentarios:

Placa de Facebook

Webmaster/Editor

Prof. Daniel Solari Derquin