Cambio. Proponen semisuma de IPC pasado y futuro
Los aumentos públicos para 2008 serán de 11,25% para los entes autónomos, 11,50% en la administración central y 12,25% para la banca estatal. El equipo económico quiere introducir elementos de desindexación en la fórmula de ajuste.
Sin embargo, en la práctica los incrementos en el sector público suponen recoger la inflación del año, que rondará el 8,5%, y otorgar una recuperación de entre 2,5% y 3,75%.
Los ajustes se realizarán tras un año en el que el Producto Interno Bruto (PIB) crecerá en el entorno de 6% y para un 2008 en el que las previsiones oficiales esperan que aumente alrededor de 3,75%, aunque probablemente esta cifra sea corregida al alza a fin de año.
El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) planteará el lunes en el Consejo Superior Público que los ajustes de salarios de los funcionarios de la Administración Central en enero de 2008 sea "basado en una semisuma de inflación pasada (en este año) más inflación futura (esperada para 2008)", dijo a El País el asesor del MEF, Daniel Mesa. A eso se sumará un porcentaje de recuperación por el poder de compra perdido entre 2000 y 2005 -calculado sobre la variación del PIB- que se estima en el cálculo oficial que rondará el 4,25%.
Para la Administración Central, la ley de Presupuesto aprobada al comienzo de la actual administración establece que el ajuste anual considerará el IPC y una recuperación del 75% de la variación del PBI entre el primer y tercer trimestre. Si, como se espera, el tercer trimestre cierra con un incremento del producto de 6%, la recuperación debiera ser de 4,5%.
Otro IPC. Con el cambio de fórmula, el gobierno procura desvincular (desindexar) lo más posible el aumento salarial de la variación de precios. "Las estimaciones que hay de inflación, es que tiende a nivelarse en cifras menores (a las de este año)", señaló Mesa. En el período enero-octubre la inflación fue de 8,4%.
Sin embargo, este guarismo de IPC sufrirá en lo que queda del año al menos el anunciado aumento de los combustibles que se postergó y que le ocasiona a Ancap una pérdida de US$ 20 millones al mes según dijo el pasado jueves el presidente del ente, Daniel Martínez. Por ello, el IPC de 2008 seguramente cerrará en 8,5% o algo más.
Mesa señaló que el ajuste, que se fija por decreto de acuerdo a las especificaciones de la ley de Presupuesto de 1986, establece que el incremento deberá hacerse "tomando en consideración la variación del IPC", pero allí no se establece que sea el IPC del año anterior. Es en base a esta interpretación que el equipo económico maneja la "semisuma" de la inflación pasada y la futura. Como la pasada se ubicará en 8,5%, para llegar al 7,25% que maneja el gobierno se está esperando para el año que viene una inflación casi en el techo de la previsión.
Para el período enero-diciembre de 2008, la mediana de los analistas consultados por el Banco Central (BCU) prevé que la suba del IPC sea de 6,5%. El BCU se fijó como objetivo que la inflación se ubique en ese período entre 4% y 6%.
En los ajustes anteriores, el IPC que se consideró fue el del año precedente. El último ajuste salarial de los funcionarios de la Administración Central, en enero de este año, se realizó por todo el aumento que tuvo el IPC el año pasado (6,38%), a lo que se le sumó una recuperación de 4,66%. El incremento de salarios públicos en enero fue de 11,34%.
Antecedente. Esta fórmula del IPC según una semisuma de inflación pasada y futura para establecer los aumentos a los públicos ya fue empleada durante la primera administración colorada posdictadura, mientras Ricardo Zerbino era ministro de Economía.
En los salarios públicos se aplica también la ley 16.903, de 1997, que establece que el Ejecutivo podrá adecuar las remuneraciones por períodos no menores de seis meses ni mayores de doce, siempre que la variación de precios al consumo, en años móviles, resulte inferior al 10% anual en cada una de las mediciones mensuales posteriores al último ajuste.
Fuente: El País, 24 de noviembre
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