Ayer en la tarde, compartimos un rato ameno con motivo del festejo del día del Ama de casa en la sede de dicha Liga.
Por supuesto que entre los participantes hubo inquietudes sobre el Proyecto de Ley que presentaremos en el día de la fecha sobre la Jubilación de las Amas de casa.
Surgieron entonces, las dudas lógicas de cualquier persona que toma contacto por primera vez con el texto del Proyecto.
Algunas consideraciones que queremos compartir con Uds. de aprobarse la Ley en cuestión.
La Ley implica un verdadero cambio cultural. Reconocer que todos los Amas de casa merecen una jubilación no es poca cosa.
El ser Ama de casa es sinónimo de tener empleo y no solamente trabajo los siete días de la semana.Y el hecho de reconocer que tiene empleo implica a su vez, el derecho a jubilación.
Hablamos de una cobertura para su vejez y no de un sueldo mensual por su trabajo.
La propia familia que goza del privilegio de contar con ella, también debe preocuparse y velar por cualquier eventualidad en su futuro. Por eso, se hará cargo de los aportes correspondientes para la jubilación o cobertura y por tanto, no será oneroso para el Estado.
La Ley en cuestión, no implica ningún aumento en los aportes de los trabajadores. Si habrá que renunciar a una parte de su propia jubilación durante el tiempo que especifica la ley.
Podrán renunciar entonces a la tercera parte de sus propios aportes y generar así, de manera solidaria la buscada cobertura jubilatoria del Ama de casa.
Si alguno de los diferentes hogares, por elección o por obligación, tiene Ama de casa, es de estricta justicia que también se hagan cargo de su jubilación.
Hay 300.000 amas de casa de las cuales 100.000 podrían tener acceso a una jubilación de forma inmediata porque la retroactividad forma parte del Proyecto de Ley.
Esperamos entonces los necesarios aportes de los distintos Representantes Nacionales y mejorar o perfeccionar el Proyecto de Ley en lo que sea necesario para necesaria aprobación y saldar una deuda con todos quienes cumplen el rol mencionado.
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