Alivio en IRPF calma al Frente, pero la oposición ve un afán electoralista
El presidente Vázquez dijo a sus ministros que la medida no tiene propósitos políticos
El presidente Tabaré Vázquez y el ministro de Economía, Danilo Astori, anunciaron ayer el nuevo mínimo no imponible del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y lograron calmar la ansiedad y los reclamos de quienes en el Frente Amplio advertían que el efecto del tributo en los trabajadores –sobre todo en la clase media– podía generar riesgos electorales en 2009.
Las modificaciones en la reforma tributaria fueron también bien recibidas en el PIT-CNT, pero no en la oposición blanca y colorada.
Mientras dirigentes de la central sindical reconocieron que los cambios son positivos y van en línea con sus reclamos, desde la oposición surgieron opiniones que adjudicaron al gobierno un interés electoral.
Aseguran que de esta forma se le prepara el terreno a Astori, quien a mediados de setiembre dejará el Ministerio de Economía para dedicarse a su precandidatura a la Presidencia por el FA.
En el Consejo de Ministros de ayer Vázquez se anticipó a estas críticas y advirtió a su gabinete que las modificaciones al sistema tributario se hacen “lejos de cualquier especulación electoral”.
“Un gobierno no puede hacer demagogia con estos temas”, sentenció el presidente, según dijeron a El Observador miembros del gabinete.
Ahora, con la decisión de Vázquez y Astori, en la izquierda respiran más tranquilos y piensan en la cantidad de trabajadores que verán aliviada o eliminada su carga tributaria. Y es que con el nuevo mínimo no imponible son 170.000 asalariados los que dejarán de pagar el IRPF. De los 400.000 contribuyentes que pagan este impuesto, el 40% quedó exonerado de abonar, anunció el gobierno.
Además, todos los trabajadores con hijos menores de 18 años o con capacidades diferentes, verán duplicado el monto que puede deducir. Pasará de $ 961 por mes a $ 1.922 (ver página 5).
La propuesta del gobierno, que llegará al Parlamento esta misma semana, propone aplicar los cambios a partir del mes siguiente a que sean aprobados.
En el Frente están todos de acuerdo en votar el proyecto de ley en agosto para que el nuevo mínimo no imponible y las deducciones comiencen a regir de inmediato, desde setiembre.
“Cumplimos”. Ante su gabinete, Vázquez hizo una larga reseña del IRPF.
Recordó cuando se decidió incorporarlo en el programa de gobierno y reseñó las circunstancias en las que se planteó la reforma tributaria en 2005.
También se refirió a su discurso de marzo pasado en Paso de los Toros cuando anunció que en julio modificaría el impuesto.
Responsabilidad. Vázquez señaló a sus ministros la “responsabilidad” y la “seriedad” con que decidió los cambios. Hizo hincapié en el “cumplimiento del programa” de gobierno y en su “coherencia” a la hora de aplicar las modificaciones en los tiempos que anunció. Aseguró también que estaba “muy conforme” con la solución acordada con Astori la semana pasada.
El ministro de Economía explicó a fondo los cambios y detalló los tiempos de aplicación. Además indicó que las modificaciones a la reforma tributaria ascenderán a US$ 100 millones.
Más tarde el director de Planeamiento y Presupuesto, Enrique Rubio, destacó que “poco más del 10% de la Población Económicamente Activa pagará IRPF”, confiaron a El Observador participantes del gabinete. Todos los ministros dieron después su visto bueno de forma unánime.
Satisfechos. “Estos cambios son notables, brillantes”, aseguró exultante el secretario general del Partido Socialista, Eduardo Fernández.
Su par del Partido Comunista, el senador Eduardo Lorier, recordó que su sector quería un mínimo de $ 16.000, pero que en la discusión con otros sectores se habló de subirlo solo a $ 10.600.
Por eso consideró que el monto fijado en $ 12.425 es “un aceptable camino del medio al que se llega por acuerdo”.
Aún así los comunistas insistirá en aumentar el Impuesto a las Actividades Empresariales de 25% a 30%.
Para el diputado Diego Cánepa (Nuevo Espacio) “hay que valorar el enorme esfuerzo que aliviará los salarios más bajos manteniendo la prudencia fiscal”.
El MPP ya dijo que acepta los cambios, aunque pretendía más deducciones por educación y vivienda, aseguró el diputado Héctor Tajam.
El PIT-CNT se reunirá hoy para analizar los anuncios. El coordinador de la central sindical, Juan Castillo, ya pidió una evaluación al Instituto Cuesta Duarte. Consultado por El Observador, aseguró que el nuevo mínimo imponible “va en la línea de lo que quería el PIT” y que los cambios son “muy positivos” porque “benefician a una cantidad enorme de trabajadores”.
El equilibrio fiscal y el recorte tributario
El presidente Tabaré Vázquez aseguró que actualmente el déficit fiscal es “pequeñísimo”, del 0,4%, y que al final del gobierno se estará “prácticamente logrando el equilibrio”. Según supo El Observador, con los cambios al IRPF el déficit será algo mayor. Fuentes oficiales hablan que podría llegar al 1%. Ayer Vázquez apuntó que otros gobiernos terminaron con déficit de “3, 4 o 5 puntos”.
Voces de la oposición
Jorge LarrañagaLíder de Alianza Nacional, Partido Nacional
“Puede ser un avance positivo dentro de una mala reforma. Se recoge la prédica de subir el mínimo no imponible pero lamentablemente no se hizo retroactivo al 1º de enero ni se elevaron todas las franjas. Se sigue castigando a las rentas del trabajo por encima de las rentas del capital”.
Luis LacalleLíder de Unidad Nacional, Partido Nacional
“Lo que ha hecho el gobierno se trata de ingeniería social de la peor especie. Se trata de una especie de plataforma electoral para el ministro de Economía, Danilo Astori. Este impuesto ya está muerto o merece morir. Max SapolinskyDirigente de Vamos Uruguay, Partido Colorado
“Es un maquillaje del gobierno para una reforma impositiva que ha castigado duramente a la clase media uruguaya. Con esta medida se quiere hacer pasar como que se saca presión a la gente, pero sigue afectando a un grupo importante de ciudadanos. Esto tiene un trasfondo electoral”.
Luis HierroPrecandidato del Foro Batllista, Partido Colorado
“El gobierno sigue creyendo que las personas que ganan más de 12 mil pesos generan renta y ese es un error conceptual muy grande. El IRPF sigue siendo un impuesto al trabajo. Y el grueso de la población sigue pagando un impuesto injusto que hay que derogar cuanto antes”.
El mínimo no imponible era muy bajo y sigue siendo muy bajo”.
Iván PosadaDiputado del Partido Independiente
“El gobierno no termina de entender que Uruguay es un país de clase media. Y que para hacer frente a los gastos que demanda una familia, y para llevar una vida digna, se requiere un ingreso de unos 30 mil pesos. Además, las liquidaciones por núcleo familiar son confusas por no decir absurdas”.
El Observador, 29 de julio
El presidente Vázquez dijo a sus ministros que la medida no tiene propósitos políticos
El presidente Tabaré Vázquez y el ministro de Economía, Danilo Astori, anunciaron ayer el nuevo mínimo no imponible del Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y lograron calmar la ansiedad y los reclamos de quienes en el Frente Amplio advertían que el efecto del tributo en los trabajadores –sobre todo en la clase media– podía generar riesgos electorales en 2009.
Las modificaciones en la reforma tributaria fueron también bien recibidas en el PIT-CNT, pero no en la oposición blanca y colorada.
Mientras dirigentes de la central sindical reconocieron que los cambios son positivos y van en línea con sus reclamos, desde la oposición surgieron opiniones que adjudicaron al gobierno un interés electoral.
Aseguran que de esta forma se le prepara el terreno a Astori, quien a mediados de setiembre dejará el Ministerio de Economía para dedicarse a su precandidatura a la Presidencia por el FA.
En el Consejo de Ministros de ayer Vázquez se anticipó a estas críticas y advirtió a su gabinete que las modificaciones al sistema tributario se hacen “lejos de cualquier especulación electoral”.
“Un gobierno no puede hacer demagogia con estos temas”, sentenció el presidente, según dijeron a El Observador miembros del gabinete.
Ahora, con la decisión de Vázquez y Astori, en la izquierda respiran más tranquilos y piensan en la cantidad de trabajadores que verán aliviada o eliminada su carga tributaria. Y es que con el nuevo mínimo no imponible son 170.000 asalariados los que dejarán de pagar el IRPF. De los 400.000 contribuyentes que pagan este impuesto, el 40% quedó exonerado de abonar, anunció el gobierno.
Además, todos los trabajadores con hijos menores de 18 años o con capacidades diferentes, verán duplicado el monto que puede deducir. Pasará de $ 961 por mes a $ 1.922 (ver página 5).
La propuesta del gobierno, que llegará al Parlamento esta misma semana, propone aplicar los cambios a partir del mes siguiente a que sean aprobados.
En el Frente están todos de acuerdo en votar el proyecto de ley en agosto para que el nuevo mínimo no imponible y las deducciones comiencen a regir de inmediato, desde setiembre.
“Cumplimos”. Ante su gabinete, Vázquez hizo una larga reseña del IRPF.
Recordó cuando se decidió incorporarlo en el programa de gobierno y reseñó las circunstancias en las que se planteó la reforma tributaria en 2005.
También se refirió a su discurso de marzo pasado en Paso de los Toros cuando anunció que en julio modificaría el impuesto.
Responsabilidad. Vázquez señaló a sus ministros la “responsabilidad” y la “seriedad” con que decidió los cambios. Hizo hincapié en el “cumplimiento del programa” de gobierno y en su “coherencia” a la hora de aplicar las modificaciones en los tiempos que anunció. Aseguró también que estaba “muy conforme” con la solución acordada con Astori la semana pasada.
El ministro de Economía explicó a fondo los cambios y detalló los tiempos de aplicación. Además indicó que las modificaciones a la reforma tributaria ascenderán a US$ 100 millones.
Más tarde el director de Planeamiento y Presupuesto, Enrique Rubio, destacó que “poco más del 10% de la Población Económicamente Activa pagará IRPF”, confiaron a El Observador participantes del gabinete. Todos los ministros dieron después su visto bueno de forma unánime.
Satisfechos. “Estos cambios son notables, brillantes”, aseguró exultante el secretario general del Partido Socialista, Eduardo Fernández.
Su par del Partido Comunista, el senador Eduardo Lorier, recordó que su sector quería un mínimo de $ 16.000, pero que en la discusión con otros sectores se habló de subirlo solo a $ 10.600.
Por eso consideró que el monto fijado en $ 12.425 es “un aceptable camino del medio al que se llega por acuerdo”.
Aún así los comunistas insistirá en aumentar el Impuesto a las Actividades Empresariales de 25% a 30%.
Para el diputado Diego Cánepa (Nuevo Espacio) “hay que valorar el enorme esfuerzo que aliviará los salarios más bajos manteniendo la prudencia fiscal”.
El MPP ya dijo que acepta los cambios, aunque pretendía más deducciones por educación y vivienda, aseguró el diputado Héctor Tajam.
El PIT-CNT se reunirá hoy para analizar los anuncios. El coordinador de la central sindical, Juan Castillo, ya pidió una evaluación al Instituto Cuesta Duarte. Consultado por El Observador, aseguró que el nuevo mínimo imponible “va en la línea de lo que quería el PIT” y que los cambios son “muy positivos” porque “benefician a una cantidad enorme de trabajadores”.
El equilibrio fiscal y el recorte tributario
El presidente Tabaré Vázquez aseguró que actualmente el déficit fiscal es “pequeñísimo”, del 0,4%, y que al final del gobierno se estará “prácticamente logrando el equilibrio”. Según supo El Observador, con los cambios al IRPF el déficit será algo mayor. Fuentes oficiales hablan que podría llegar al 1%. Ayer Vázquez apuntó que otros gobiernos terminaron con déficit de “3, 4 o 5 puntos”.
Voces de la oposición
Jorge LarrañagaLíder de Alianza Nacional, Partido Nacional
“Puede ser un avance positivo dentro de una mala reforma. Se recoge la prédica de subir el mínimo no imponible pero lamentablemente no se hizo retroactivo al 1º de enero ni se elevaron todas las franjas. Se sigue castigando a las rentas del trabajo por encima de las rentas del capital”.
Luis LacalleLíder de Unidad Nacional, Partido Nacional
“Lo que ha hecho el gobierno se trata de ingeniería social de la peor especie. Se trata de una especie de plataforma electoral para el ministro de Economía, Danilo Astori. Este impuesto ya está muerto o merece morir. Max SapolinskyDirigente de Vamos Uruguay, Partido Colorado
“Es un maquillaje del gobierno para una reforma impositiva que ha castigado duramente a la clase media uruguaya. Con esta medida se quiere hacer pasar como que se saca presión a la gente, pero sigue afectando a un grupo importante de ciudadanos. Esto tiene un trasfondo electoral”.
Luis HierroPrecandidato del Foro Batllista, Partido Colorado
“El gobierno sigue creyendo que las personas que ganan más de 12 mil pesos generan renta y ese es un error conceptual muy grande. El IRPF sigue siendo un impuesto al trabajo. Y el grueso de la población sigue pagando un impuesto injusto que hay que derogar cuanto antes”.
El mínimo no imponible era muy bajo y sigue siendo muy bajo”.
Iván PosadaDiputado del Partido Independiente
“El gobierno no termina de entender que Uruguay es un país de clase media. Y que para hacer frente a los gastos que demanda una familia, y para llevar una vida digna, se requiere un ingreso de unos 30 mil pesos. Además, las liquidaciones por núcleo familiar son confusas por no decir absurdas”.
El Observador, 29 de julio
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