miércoles, 31 de octubre de 2007

PIT-CNT mucho más amarillo que antes


Existe preocupación en la central por el cariz que están tomando algunos conflictos por temas ya laudados

Mayoría de dirigentes dijo que las reformas tributaria y de salud no volverán a discutirse. Bancarios públicos aplicarán hoy medidas de distorsión que afectarán servicios a la población
La mayoría de los dirigentes sindicales ratificaron ayer en el Secretariado Ejecutivo del PIT-CNT su respaldo a la reforma tributaria y a la reforma de la salud, en lo que fue interpretado como un fuerte mensaje para los trabajadores municipales y de los bancos públicos que en las últimas semanas han cuestionado algunos aspectos de esos cambios estructurales en los que el gobierno de izquierda se juega gran parte de sus chances electorales.
“Esos temas están laudados por el máximo órgano de la central sindical que es la Mesa Representativa y nos llevó bastante tiempo tomar esas decisiones por lo que no están abiertos a la más mínima discusión”, dijo a El Observador uno de los principales referentes de la central obrera.
En ese sentido se expresaron varios dirigentes de las diferentes corrientes de opinión que conviven en la interna sindical, aunque el tema no fue sometido a votación, dijeron las fuentes.
La semana pasada, varios dirigentes plantearon en el Secretariado Ejecutivo su preocupación porque algunos conflictos se les están “yendo de las manos” y expresaron que debían encontrar alguna manera de incidir en la estrategia de los sindicatos que llevan adelante medidas que distorsionan servicios importantes a la población.
La Mesa Representativa del PIT-CNT emitió meses atrás un comunicado en el que consideró que la reforma tributaria es un “avance” con respecto al sistema impositivo anterior, aunque solicitó una serie importante de cambios, entre ellos elevar el monto mínimo no imponible y correr las franjas impositivas. La central sindical también exigió en diversas oportunidades al gobierno que “apure” la reforma de la salud para que más cantidad de uruguayos tengan cobertura.
En este contexto, hoy se llevará adelante una jornada de movilización de los bancarios públicos y una nueva reunión entre representantes de los trabajadores bancarios y del Poder Ejecutivo para intentar destrabar un intenso conflicto que ya lleva más de 45 días y por el que se han distorsionado severamente los servicios a los usuarios.
Las medidas implicarán el cierre de cajas a las 15 horas y el retiro de los lugares de trabajo a las 17 horas en todas las agencias y sucursales del Banco de Seguros del Estado (BSE), del Banco Hipotecario del Uruguay (BHU) y del Banco República (BROU).
La sucursal de Montevideo Shooping detendrá sus actividades dos horas y media de mañana y dos horas y media de tarde. Microbanca del Mercado Modelo cerrará sus cajas a las 10.30 y los mini BROU directamente no abrirán al público.
El paro afectó ayer el sector informática del BROU provocando severos atrasos en el sistema operativo. Aunque el aporte por el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF) no está en la plataforma de los bancarios, éstos no ocultan su molestia por lo que –según argumentan– les genera una pérdida en sus salarios.
Sin embargo, el sindicato dijo que sus acciones no afectarán el pago de salarios a los trabajadores estatales, que en su inmensa mayoría cobran el sueldo por la red de cajeros automáticos del BROU entre hoy y mañana, aseguraron los dirigentes gremiales. “El consejo autorizó la realización de horas extras para garantizar los pagos a los funcionarios público en los cajeros. Sabemos que es un tema sensible y no podemos tirarnos a la gente en contra”, declaró a El Observador el dirigente sindical de tendencia radical, Alejandro Gómez.
Salario y compensaciones. El salario promedio base nominal de los trabajadores de los bancos oficiales es de unos $ 28 mil, según dijeron a El Observador fuentes del propio sindicato bancario. A eso debe sumársele la cobertura de salud para todo el núcleo familiar y un sistema de escalafones denominado GEPU, que llega a representar aproximadamente el 20% del salario de los bancarios públicos.
Cada GEPU representa unos $ 1.000 y los funcionarios aumentan un GEPU al año concursen o no para ascender de categoría.
Estos beneficios fueron conseguidos por los bancarios oficiales en los 90´, luego de un extenso conflicto con el gobierno. Los funcionarios reclamaron en ese momento la equiparación con los salarios de la banca privada y se llegó a esta fórmula alternativa para compensar la diferencia de sueldo.
Es por ello que los bancarios públicos aseguran que las prestaciones de salud están “incorporadas al salario” y rechazan aumentar el aporte para la reforma de la salud, que regirá en enero, de 3% a 6%.

Fuente: El Observador, 31 de octubre

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