Editorial: La embestida baguala y la desesperanza progresista

Por Daniel Solari

La embestida baguala que advirtió el Presidente Vázquez la semana pasada por parte de los Partidos políticos de oposición se transformó en una maniobra de poca monta, que intenta licuar y disimular el inconformismo creciente que día a día le gana a los uruguayos en general pero que ahora manifiestan en voz alta.

La verdadera embestida baguala contra el Gobierno, la realizan los trabadores y en particular, los propios sindicatos del PIT-CNT que en todos los casos reivindican mejoras salariales ante la inflación que se instaló en el escenario uruguayo.

Claro que debemos agregar un nuevo ingrediente en la conflictividad que se pretende adjudicar a aspectos económicos. Es la conflictividad por el desgobierno, por la falta de ideas, por las reformas inconsultas, por la ineficiencia demostrada en 31 meses de gestión y por tanta promesa incumplida por el Presidente y su fuerza política.

Para muestra basta un botón y por tanto, tomemos la educación pública. Luego del Congreso de la Educación, del cual terminaron participando en soledad, educadores de filiación frenteamplista se llegaron a algunos acuerdos.

Este Gobierno pseudo-progresista ni siquiera, respetó dichos acuerdos y tiró sobre la mesa un anteproyecto de ley de Educación que claramente, no cumple con las reivindicaciones históricas de la Enseñanza como ser, autonomía y cogobierno.

Afinando la puntería, digamos que en el contexto del Uruguay productivo (que aún el oficialismo no logra definir de manera inteligible y precisa), la enseñanza técnica en el Uruguay, debería tener un rol de primera línea.

Con el objeto de “hacer pasar gato por liebre”, agentes políticos oficialistas, manejan en su discurso, el uso de tecnologías de última generación, como ser, la tecnología 3G en telefonía móvil, la televisión digital y la conectividad inalámbrica. Pero de Educación técnica, no se habla ni una palabra y peor aún, está planteada en dicho anteproyecto de ley, minimizar el papel de la UTU mediante un desmembramiento y su posterior pase a manos privadas, lejos de los acuerdos alcanzados en el congreso antes mencionado.

Hace menos de una semana, el Congreso de trabajadores de la UTU, le solicitó al Consejo de Educación Técnico Profesional (UTU) su renuncia. No es poca cosa, que el Consejo de un desconcentrado, apoyado políticamente y sindicalmente por el MPP, haya caído en desgracia para sus trabajadores que lo tildaron de “entreguista”, incapaz, ineficiente y funcional al Ministro Brovetto, es decir, un simple mandadero de la fuerza política oficialista.

Una última consideración, es extraño que la prensa nacional, no se haya eco de la noticia, un sindicato que por 30 meses se mantuvo funcional a los intereses del Consejo de UTU, que ahora le haya solicitado la renuncia es un hecho a subrayar. La ineficiencia e improvisación de este Gobierno, comenzó a cosechar lo que sembró. Desesperanza. He aquí, la embestida baguala que advertía Vázquez.