Una de cada diez viviendas con residentes de Montevideo está ocupada por personas que no son ni propietarias ni arrendatarias. A esa conclusión arriban analistas de la revista “Propiedades”.
Según los datos de la Encuesta Nacional de Hogares de 2005, en el decil de ingresos más bajos en Montevideo, los hogares que ocupan una vivienda con o sin permiso del propietario, representan ya un porcentaje mayor que los arrendatarios de la misma franja de ingresos y son casi el 40% del total.En el 2º decil de ingresos más bajos, quienes no son arrendatarios ni propietarios ya tienen una presencia menor y se reducen en porcentaje a menos de la mitad de los ocupantes del primer decil, dice la revista de estudios inmobiliarios.Para los analistas, el fenómeno de los ocupantes de viviendas con o sin permiso, tiene una fuerte concentración en los tres deciles de ingresos más bajos. Es precisamente el sector de la población en el que el porcentaje de arrendatarios ha bajado más drásticamente en los últimos lustros.En el 10% de pobladores de más bajos ingresos, apenas uno de cada siete hogares es arrendatario en la vivienda que ocupan. Se subraya que en barrios como Ciudad Vieja, La Aguada, Centro, La Comercial, La Teja y otros similares poseían elevados porcentajes de hogares arrendatarios. Los inquilinos eran mayoría. Es precisamente de esos barrios formales, que salió mayoritariamente la primera oleada de emigrantes a los asentamientos irregulares en Montevideo. El porcentaje de hogares arrendatarios baja, hasta el penúltimo decil de ingresos más altos. En esa franja de clase media alta se ubica el menor porcentaje de arrendatarios, menos del 12% del total de hogares. Sorpresivamente en el decil de ingresos más altos, el porcentaje de familias arrendatarias sube, hasta casi alcanzar el 20% del total.
Últimas Noticias, 25 de setiembre
Según los datos de la Encuesta Nacional de Hogares de 2005, en el decil de ingresos más bajos en Montevideo, los hogares que ocupan una vivienda con o sin permiso del propietario, representan ya un porcentaje mayor que los arrendatarios de la misma franja de ingresos y son casi el 40% del total.En el 2º decil de ingresos más bajos, quienes no son arrendatarios ni propietarios ya tienen una presencia menor y se reducen en porcentaje a menos de la mitad de los ocupantes del primer decil, dice la revista de estudios inmobiliarios.Para los analistas, el fenómeno de los ocupantes de viviendas con o sin permiso, tiene una fuerte concentración en los tres deciles de ingresos más bajos. Es precisamente el sector de la población en el que el porcentaje de arrendatarios ha bajado más drásticamente en los últimos lustros.En el 10% de pobladores de más bajos ingresos, apenas uno de cada siete hogares es arrendatario en la vivienda que ocupan. Se subraya que en barrios como Ciudad Vieja, La Aguada, Centro, La Comercial, La Teja y otros similares poseían elevados porcentajes de hogares arrendatarios. Los inquilinos eran mayoría. Es precisamente de esos barrios formales, que salió mayoritariamente la primera oleada de emigrantes a los asentamientos irregulares en Montevideo. El porcentaje de hogares arrendatarios baja, hasta el penúltimo decil de ingresos más altos. En esa franja de clase media alta se ubica el menor porcentaje de arrendatarios, menos del 12% del total de hogares. Sorpresivamente en el decil de ingresos más altos, el porcentaje de familias arrendatarias sube, hasta casi alcanzar el 20% del total.
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