El discurso de Vázquez para el Observador

El gobierno aprobará ley para aliviar el IRPF entre julio y enero
El Presidente laudó diferencias entre Astori y algunos sectores del Frente

Tabaré Vázquez reivindicó el proyecto de izquierda, pero negó que fuera un acto político. “Estén seguros de que nadie quiere volver a los tiempos de antes”, dijo el primer mandatario

El presidente Tabaré Vázquez decidió ayer, tras reunirse con el ministro de Economía, Danilo Astori, que los cambios a la reforma tributaria se implementarán luego de julio de este año pero antes de enero de 2009. Fue así que laudó las diferencias que el ministro tenía con comunistas, socialistas y dirigentes de la Vertiente Artiguista que le exigían poner en práctica los cambios cuanto antes.
“Hoy acordamos con el presidente una postura más cuidadosa, incluso más prudente que la original, que es esperar hasta julio para hacer cualquier anuncio de cambios en el sistema tributario”, dijo Astori a El Observador. El gobierno tenía previsto modificar la reforma tributaria pero en enero de 2009. junto con la entrada en vigencia de la Rendición de Cuentas.

El anuncio fue realizado por Vázquez en un acto del gobierno, en el que mostró a la izquierda como el “mejor proyecto político que tiene este país”. Allí el presidente ratificó que en julio (al cumplirse un año de recaudación del IRPF) y con los gastos ya proyectados para el próximo año en la Rendición de Cuentas, va a ser posible calcular los cambios para así mantener un equilibrio fiscal.

“Hoy cuando no sabemos lo que va a ingresar con la reforma tributaria y lo que va a egresar por la Rendición no es posible aventurar una resolución de cuánto y cuándo vamos a hacer los cambios”, dijo Vázquez. “Mientras, son todas especulaciones”, agregó.

El gobierno sigue pensando en los mismos cambios. “Aumentar el mínimo imponible, dar la opción de liquidar por núcleo familiar y aumentar las deducciones por hijos menores, pero vamos a esperar un año de vigencia de la reforma para decidir, y eso es julio de este año”, dijo Astori.

Gobierno y FA. “Hasta la victoria... siempre”. Con ese latiguillo Vázquez terminaba todos sus discursos durante la campaña electoral y ayer lo usó para terminar el acto en Paso de los Toros. Antes dijo que el de la izquierda “es el mejor proyecto político que tiene este país y (que) no hay otro”.

“Estén seguros que nadie quiere volver a los tiempos de antes. No. Quieren seguir por este camino. Tenemos que profundizar los cambios”, dijo.

Cuando llegó Vázquez las banderas del FA y de los distintos sectores de la coalición comenzaron a agitarse como si el que entrara fuera el candidato. De hecho, un gran cartel, sostenido por dos paisanos de botas, bombacha y boina decía: “Que se quede, Tabaré 2009”. Antes que comenzara el mitin los casi 3.000 asistentes cantaban: “O le le, o la la, ¿si esto no es el Frente, el Frente dónde está?” y “El pueblo unido, jamás será vencido”.

El presidente, sin embargo, dijo que el acto no era del FA sino del gobierno. “Mañana no faltará algún profeta del oscurantismo, del negativismo, del que ve todo mal, de quienes nos atribuyen expresiones espurias y dirá que este era un acto frenteamplista. Este es un acto del gobierno nacional para todos los uruguayos”, dijo Vázquez.

Tanto cuando llegó como cuando se retiró, Vázquez fue abrazado por cuanta persona se le puso al frente. Todos querían un beso, un autógrafo, una foto. Que se quede cinco años más era el pedido unánime. “Yo me voy pero van a quedar en buenas manos”, dijo Vázquez varias veces tras el pedido de la gente.

Carteles. Además de darle la bienvenida al presidente y a todos los ministros, la gente aprovechó para reclamarle al gobierno a través de los carteles. “Tacuarembó: el pago más grande de la patria con los salarios más bajos del país”. “Tabaré, por qué no me puedo desafiliar de las AFAP, el decreto es ilegal”. Ni bien comenzó a hablar Vázquez anunció que en “cuatro semanas” iba a haber novedades sobre el reclamo de desafiliación libre de las AFAP.

Entre el gasto y la prudencia
Hecho del día

El presidente Tabaré Vázquez, junto a sus ministros, se movilizó ayer hasta Paso de los Toros para realizar un acto público con el propósito de difundir y exaltar su gestión en un discurso que tuvo poco del frío tono del balance. Las permanentes invocaciones a su fuerza política y al proyecto de izquierda agregaron condimentos a una intervención presidencial en la que menudearon las respuestas a sus adversarios políticos y alguna crítica hacia los medios de comunicación. En su intervención, el mandatario laudó otra vez las diferencias internas de la coalición de gobierno, esta vez referidas a la entrada en vigencia de modificaciones al Impuesto a la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Mientras el ministro Danilo Astori propuso subir el mínimo no imponible del tributo a partir de enero de 2009, varios sectores le exigieron que adoptara esa medida a partir de julio, guiados por urgencias electorales. Ante ello, Vázquez anunció que la medida se adoptará entre julio y diciembre, después de la Rendición de Cuentas. Es evidente que el ministro y también el presidente quieren vigilar la caja ya que, como se adelantó, otra vez el oficialismo se propone expandir el gasto público en más de US$ 100 millones con destino a la educación.
Ya aparecerán otras iniciativas para invertir los recursos obtenidos por los impuestos de toda la sociedad. Sin embargo, todo tiene un límite y el nivel de gasto en el próximo proyecto presupuestal reducirá las posibilidades de aflojar la cincha impositiva, algo que muchos sectores se rehúsan a aceptar. Vienen las elecciones y la disponibilidad fiscal es una poderosa tentación para la demagogia. Es de esperar que en el gobierno prime la prudencia, sobre todo cuando el riesgo de recesión en Estados Unidos provoca sombras para la salud de la economía internacional en la que Uruguay es un actor vulnerable.

Lo dijo

Tabaré Vázquez
Presidente de la República
«Yo me voy, pero van a quedar en buenas manos»
«Este proyecto es hecho por la izquierda con sangre, sudor y lágrimas. Fue elaborado no solo por la izquierda sino por toda la sociedad. Es el mejor proyecto político que tiene este país y no hay otro»
«Algunos dirigentes políticos están expresando que gobiernos anteriores recibieron el país peor que nosotros. No tergiversemos»

Respuestas a opositores y a los críticos de su gestión

El presidente Vázquez no escatimó duras respuestas a la oposición y a sus críticos. También se burló de alguna nota periodística. “No sé cómo me voy a levantar mañana con todo lo que voy a decir”, dijo.
Al defender el Plan Ceibal, fue duro con el ex presidente del Codicen, Germán Rama, a quien trató, sin nombrarlo, de “tecnócrata y opinador”. Rama había cuestionado el plan por considerarlo “caro”, ideológico y que carece de sustento empírico. “Cosa brava cuando se juntan el iluminismo y el malhumor. Como se las saben todas están malhumorados”, dijo Vázquez.

También dijo que desde la oposición se dicen verdades a medias y, al aludir a dichos de Luis A. Lacalle, dijo que es mentira cuando señalan que el ex presidente recibió el país en peores condiciones. “El 2002 fue la peor crisis económica, financiera y cultural. ¿No todos dijimos eso?”, se preguntó.

Con paro no hay cita

El presidente Vázquez se mostró ayer muy enojado con sus colegas los médicos y dijo que no los recibirá ya que anunciaron un paro para mañana y luego pidieron entrevista. “No somos magos. Tenemos que tener seriedad en los dineros. Hemos dialogado y vamos a seguir dialogando”, dijo.

El Observador, 11 de marzo