Se endurece el cruce de acusaciones
La Cancillería argentina rechazó "con indignación" este viernes una queja de Uruguay, que había acusado al país de falta de acción ante supuestas amenazas de actos terroristas por ambientalistas que se oponen a la construcción de Botnia
"La Cancillería rechazó con indignación estas alusiones, considerando las mismas no sólo ofensivas, sino particularmente injustas para un país que ha sufrido en carne propia el flagelo del terrorismo", dijo la nota entregada al embajador uruguayo en Buenos Aires, Francisco Bustillo.
En reacción a una nota enviada por Uruguay el martes, el gobierno del presidente Néstor Kirchner dijo que "no es con este tipo de manifestaciones efectistas e irreflexivas que pueden sentarse las bases para una solución de la controversia que mantienen nuestros países".
Bustillo volvió a ser convocado este viernes, por segundo día consecutivo, luego de haberle sido entregada el jueves otra nota que señalaba la "más fuerte inquietud" por un episodio de intoxicación de obreros en la fábrica de celulosa que la finlandesa Botnia construye a orillas del río Uruguay, de soberanía compartida.
La queja de la Cancillería uruguaya señalaba el martes que el Gobierno argentino "no está actuando acorde a sus compromisos internacionales en la lucha contra el terrorismo".
El gobierno del presidente Tabaré Vázquez manifestaba su "preocupación" porque no le "consta" que se haya actuado "acorde con la gravedad" de las presuntas amenazas de supuestos atentados con explosivos contra la planta de parte de activistas argentinos, que rechazan el emprendimiento por considerarlo contaminante.
Ambientalistas argentinos protestan desde hace dos años con bloqueos a puentes y rutas que unen Argentina con Uruguay.
La Cancillería aseguró en la nota emitida este viernes que las manifestaciones de Uruguay "sólo contribuyen a agravar las fuertes tensiones ya existentes" entre ambos países e instó al gobierno de Vázquez a "reconducir la controversia al terreno de los hechos".
En ese sentido expresó que la planta de Botnia "ha dado recientemente pruebas de su carácter perjudicial para el ecosistema asociado al Río Uruguay y sus áreas de influencia, con particular detrimento a la salud y bienestar de las comunidades adyacentes a ese curso fluvial".
El prolongado diferendo que sostienen Argentina y Uruguay se sustancia en el Tribunal Internacional de La Haya, donde representantes de ambos países volverán a encontrarse en setiembre.
Según Buenos Aires, un accidente químico en Botnia que provocó la intoxicación de obreros afectó también la salud de ciudadanos argentinos de Gualeguaychú (230 km al norte de Buenos Aires), en la orilla opuesta a la uruguaya Fray Bentos, donde se levanta la fábrica.
La primera convocatoria
Este jueves la Cancillería argentina había convocado al embajador de Uruguay para expresarle su "más fuerte inquietud" por los efectos de un accidente químico ocurrido en la planta de celulosa de la compañía finlandesa Botnia construida sobre el compartido río Uruguay, por la que ambos países mantienen una larga disputa.
"Alarmada por estos acontecimientos, la Cancillería ha procedido inmediatamente a convocar al Embajador del Uruguay en Buenos Aires, Francisco Bustillo, a fin de hacerle entrega de una nota en la que transmite 'su más fuerte inquietud' por este grave episodio, que involucra a un emprendimiento ilícito, autorizado y desarrollado sobre un recurso fluvial compartido en violación de un tratado bilateral", informó el ministerio en un comunicado.
"Este episodio representa una evidencia adicional de lo que nuestro país ha señalado reiteradamente y que el Uruguay pretende negar: que, en la localización unilateralmente elegida, el proyecto Orion, a cargo de la empresa Botnia, es perjudicial para el ecosistema asociado al Río Uruguay y sus áreas de influencia, incluyendo particularmente la salud y el bienestar de las comunidades adyacentes", agregó el ministerio.
Los casi 3.000 operarios de la empresa mantienen una huelga luego de que el martes pasado se volcó sulfuro de sodio --que es utilizado para el blanqueo de la madera-- dejando a 16 obreros con síntomas de intoxicación. Todos ya ha sido dados de alta.
Fuente: Observa, 18 de agosto
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