jueves, 28 de agosto de 2008

Mateo Mendez enfrentó primer motín en la Berro






Hable con ellos
Mateo Méndez disolvió el motín de la Berro dialogando, sin violencia
Ayer, a doce días de que el padre Mateo Méndez asumió la dirección del Instituto Técnico de Rehabilitación Juvenil (Interj), se produjo un motín en el Hogar Ser, el de máxima seguridad de la Colonia Berro.
Según trascendió, los internos tomaron dos rehenes y rompieron algunas cosas. Los disturbios se
produjeron de madrugada y los reclamos fueron en relación a las condiciones de alojamiento. Uno
de los rehenes fue liberado a las 2.00 y otro a las 3.20 horas.
En conferencia de prensa, Méndez dijo que los jóvenes reclamaron más tiempo “de patio”, realizar actividades al aire libre y trabajo de huerta o de jardín, par- ticipar del tiempo escolar y liceal, y que mejore la calidad de la comida.
También exigieron más tiempo para higienizarse y utilizar los baños y se comprometieron a ser obedientes a la hora de finalizar el horario de actividades y entrar en las celdas, a cuidar el ambiente y la higiene del lugar, y a mantener la higiene personal. Dijeron que hay lugares en el Ser en donde quieren estar y otros en los que no. Entre los primeros figuran los espacios comunitarios, que les permiten sentirse más relacionados.
Los jóvenes le dijeron a Méndez: “Tenemos mucha energía y queremos gastarla”, por lo que también pidieron un espacio para realizar tareas recreativas y deportivas y sentir que gastan sus energías.
Interrogado sobre la posibilidad de que esos espacios se instrumenten, Méndez contestó que “no son no realizables”. “No se han instalado antes porque siempre existe el miedo a la fuga, al desacato.
No deberíamos trabajar con tanto miedo”, consignó.
Según el nuevo director de Interj, luego de los reclamos se encontraron con una situación diferente. No hubo sanciones porque no siempre resultan educativas.
“Las prácticas y actitudes que tomamos no siempre ayudan al adolescente. Todo lo que exagera el encierro siempre produce un elemento negativo. El Ser tiende a desaparecer y es bueno que desaparezca”, dijo, y agregó que tanto la demanda como el compromiso de los jóvenes allí recluidos son frágiles, porque ellos están frágiles: “El encierro no fortalece y genera conflictividad”.
A su entender, hay que buscar un equilibrio entre “hasta dónde se tranca y hasta dónde se abre. Las descompensaciones de los adolescentes se producen porque todo se va desgastando hasta que se produce un estallido como el de ayer”. Por eso, llamó a buscar espacios de libertad interior.
Para Méndez es muy difícil sacar un hombre hecho y derecho de un lugar como el Ser, que en buena medida existe para tranquilizar a un sector de la población que quiere a los jóvenes infractores allí, pero no siempre se pregunta por qué llegaron a ese lugar. Finalmente, mencionó
que él no puede prometer nada por encima de los equipos que están trabajando en la Colonia Berro,y destacó que los jóvenes tienen que tomar parte en la formulación de proyectos de cada hogar. “Tienenque tomar parte en el proyecto de su propia vida”, afirmó.
El presidente del directorio de INAU, Víctor Giorgi, coincidió en que eso no sólo es posible sino
necesario, y agregó que se trata de bajar la violencia de la vida cotidiana de estos establecimientos.
Guerrilla y asado
Joselo López, presidente del sindicato de INAU, dijo a la diaria que no hubo ningún reclamo “específico”: el único era “cigarrillos y esas cosas”, aunque hubo quienes reclamaron “mejores condiciones”. El motín comenzó a la medianoche, en momentos en que todo parecía tranquilo. “Dos de los internos que estaban en el espacio de recreación comenzaron a abrir los candados de los jóvenes del mismo módulo.
Atacaron a un funcionario y lo hirieron en una mano. Lograron salir todos los funcionarios menos dos, que quedaron de rehenes”, dijo López. Como es habitual en estos casos, quemaron colchones,
prendieron fuego los papeles y carpetas que encontraron, y subieron a uno de los rehenes a la azotea y amenazaron con tirarlo para abajo.
También hicieron una guerrilla de huevos y un asado, aseguró López.
El turno de la mañana no quiso cumplir funciones porque entendió que no estaban dadas las condiciones, pero una vez requisados los cortes y restablecido el orden, volvieron a trabajar por la tarde.
Méndez no permitió el ingreso de la Policía, y estuvo en negociaciones hasta las cuatro de la mañana.
Andrés Tomasina, secretario general de Méndez, hizo hincapié en que todo se resolvió “con diálogo, sin violencia; se conversó con los muchachos. Cada uno regresó a su habitación y no pasó más que
eso. Hubo un movimiento de reclamo pero fue resuelto. La Policía ni siquiera entró al recinto”.
Dijo, además, que el día anterior se había desarrollado con total tranquilidad una jornada de integración y recreación de la que participaron los hogares Cerrito, la Casona, y una delegación de Colonia del INAU.
Por otra parte, López planteó que en el fin de semana ingresaron a la Colonia Berro 14 jóvenes -una cantidad que normalmente ingresa en un mes o más-, de modo que “los hogares están desbordados”.
Pero la demanda no la regulan ellos sino el Poder Judicial. Sobre la forma en que se restauró el orden, mencionó que “había una pérdida de autoridad muy importante a raíz de que el gerente anterior no respetaba los regímenes disciplinarios impuestos por las autoridades del servicio, levantaba sanciones o acordaba cosas que luego tenían que encarar los trabajadores de servicio. Era un desquicio”. Para Méndez, la clave parece ser generar espacios de diálogo y buenos vínculos, atender los reclamos pero establecer compromisos.
Como se suele decir, hablando la gente se entiende... ■
La Diaria, 28 de agosto


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Renunció director del Hogar SER tras el motín en la Berro
Funcionarios de la Colonia Berro coordinaron ayer la distribución de los jóvenes de acuerdo a su perfil con las autoridades del Instituto de Rehabilitación Juvenil. El director del hogar SER renunció por desgaste y razones de salud.
El motín fue el detonante para la renuncia del director del hogar SER, quién hace dos días se reintegró de su licencia médica. Sánchez alegó que fue por motivo del “desgaste” y por “problemas d
e salud”. Wilson Conde ocupará su lugar. El flamante gerente del Interj, Mateo Méndez, mantendrá mañana una reunión con los trabajadores de la Colonia Berro para formular pautas de trabajo. Otra consecuencia del motín fue la convocatoria al Parlamento del padre Mateo Méndez cursada por el diputado Gustavo Espinosa. La intención del legislador es “analizar la situación y las alternativas posibles para corregir las importantes deficiencias locativas, de contención y rehabilitación de los menores internados en dependencias de esa institución”.Mientras tanto, y pese a que los funcionarios brindan atención a los adolescentes que son privados de libertad por infracciones y delitos, denuncian que la Colonia Berro sigue estando “desbordada de jóvenes”. Esta situación quedó en evidencia en la medianoche de ayer, cuando cuatro internos iniciaron un motín en el hogar SER, el cual desde el 1º de este mes no recibe más jóvenes, hasta que se cierre por ausencia de los mismos. De los 15 educadores que trabajan allí, seis serán redistribuidos en los restantes hogares de la Berro. Méndez arribó a la Colonia Berro sobre la 1.45 de la madrugada del miércoles al hogar SER porque le informaron que cuatro jóvenes iniciaron un motín reclamando mejores condiciones: calidad de los alimentos, ampliación de programas y posibilidad de estudiar. No pudieron escapar porque se presentó en el lugar el Grupo Especial de Operaciones (GEO) de la Policía de Canelones, aunque no debió intervenir porque “mediante el diálogo y el afecto logramos desactivarlo”, sostuvieron a Ultimas Noticias fuentes cercanas al equipo que ingresó con Méndez. Los jóvenes exigieron el retiro de las fuerzas policiales para negociar, lo que fue efectuado por Méndez, pero se les advirtió que se buscaban para los funcionarios “las mismas garantías que para ellos”. Los amotinados tomaron como rehenes a dos funcionarios de contención, sin embargo liberaron a uno de ellos gracias a la intervención de dos educadores. Uno de ellos resultó con un corte en la mano. Cinco colchones fueron quemados, al igual que 10 frazadas y sábanas. Fue destrozado el economato y cocinaron un asado al horno durante las horas que duró el motín. Los funcionarios se reintegraron ayer en la tarde tras una asamblea que coordinó la nueva distribución de los jóvenes de acuerdo a su perfil. Además, se efectuó una requisa en todo el hogar para retirar los elementos punzantes y cortantes con los que los internos amenazaron a los funcionarios. La tensión duró hasta las 3.30 de la madrugada, cuando dejaron descender al rehén al que amenazaron con tirar de la azotea. No obstante, Méndez se retiró sobre las 7.00 tras colaborar con la limpieza del lugar. Claudia Montenegro, de la Mesa Sindical de la Colonia Berro, dijo a Ultimas Noticias que tras la asamblea “se respetarán las jerarquías y las funciones, porque sucedía que algunos directores de división acordaban condiciones con los jóvenes que después no se pueden cumplir”.
Últimas Noticias, 28 de agosto

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Colonia Berro: Padre Mateo y amotinados cara a cara Colonia Berro.

Mateo Méndez dejó a la Policía afuera y dialogó con los internos que promovieron la revuelta. Siete horas de motín; tomaron a dos rehenes y los liberaron dos horas después
Revuelta en el hogar Ser de la colonia berro. Seis adolescentes en el techo, dos rehenes, el Grupo Especial de Operaciones listo para entrar en acción. Mateo Méndez enfrenta el primer motín de su gestión entrando a negociar con los amotinados.
"Se nos preguntó si era necesario que entrara la Policía y el grupo GEO para accionar y poner las cosas en orden, y dijimos
que no, que nosotros lo queríamos hacer, porque eso es tarea nuestra" dijo Méndez, quien admitió que quiso dar una señal distinta enfrentando el problema desde el punto de vista educativo, sin recurrir al ingreso de las fuerzas policiales que apoyaban formando un perímetro en torno al lugar. "Me parece que hay que agotar primero todas las posibilidades educativas, para recién después, si fuera el caso, en extremísima situación…" recurrir a medios de fuerza, explicó.
Claudia Montenegro, presidenta de la Mesa Sindical de Colonia Berro, evaluó con cautela la forma en la que Méndez manejó el motín. "Ni a favor ni en contra; nosotros somos funcionarios, simplemente" expresó. "Apostó al diálogo y, bueno, los rehenes salieron ilesos". El restablecimiento de la normalidad demoró varias horas más que cuando ingresaba el GEO, pero "es una forma diferente de gestión; él trabaja así", añadió.
El relato de los funcionarios y del director del Interj deja sensaciones distintas. En ambos se mezclan situaciones de agresividad con actitudes casi infantiles por parte de los internos. Pero coinciden en que la nueva estrategia, al menos esta vez, tuvo buenos resultados.
REHENES. Ayer de mañana renunció el director del Ser, Claudio Sánchez, y los funcionarios que se desempeñan en ese centro se negaban a entrar a trabajar hasta no tener garantías sobre su seguridad, informó Montenegro. Para ellos había sido una de las revueltas más extensas en mucho tiempo.
Pasada la medianoche del miércoles "había unos jóvenes en espacio de recreación, y con unas `puntas` agredieron a algunos trabajadores. Cuando intervino el resto de los funcionarios, los gurises comenzaron a abrir candados, y al salir todos quedaron en inferioridad numérica. Algunos trabajadores pudieron zafar, y quedaron dos compañeros que fueron tomados como rehenes", relató Joselo López, presidente del sindicato de funcionarios del INAU.
"Lo raro es que no pedían nada. Al tener el mando del hogar podían haber intentado una fuga, y sólo reivindicaron cigarrillos", añadió López.
De los 12 internos que se encontraban en ese momento en el hogar, hubo tres, mayores de edad, que decidieron no intervenir. Igual comenzaron los gritos y daños: cinco colchones y 10 frazadas quemados, mientras las reservas de la despensa se usaban para jugar a una guerra de comida. También ingresaron a la caseta policial y rompieron una caja de madera en la que se guardaba un uniforme y una radio, y los destrozaron, dijeron testigos presenciales.
Sobre la 1.30 llegó Méndez, e ingresó al hogar junto con tres personas de su equipo de trabajo. Poco después, uno de los rehenes fue liberado. Desde arriba de la azotea amenazaban con tirar al otro rehén, pero nunca lo acercaron al borde. Tras unas dos horas de conversaciones y al ver "que no tenían cómo fugar" liberaron al funcionario. Pero durante casi dos horas más siguieron los gritos; "eran nueve y estaban exaltados", rememoró la gremialista.
Sin embargo, luego los jóvenes se bañaron, comieron y tomaron la medicación con normalidad, dijo Montenegro. Cerca de las 7.20 de la mañana se levantó el operativo de la Policía de la Seccional 16ª y el GEO.
Ayer, luego de una extensa asamblea y dos requisas, los funcionarios volvieron a ingresar a su lugar de trabajo, sobre las 16 horas. Con la dirección del establecimiento se acordó localizar a los nuevos internos según su perfil, redistribuir a nueve educadoras que están desgastadas por su permanencia en el Ser, y "respetar las escalas jerárquicas". Montenegro aludía a negociaciones en las que el ex presidente de Interj, Carlos Uriarte, "prometía cosas a los chicos que los funcionarios ni sabíamos".
MEDIADOR. "Conversar para serenar los ánimos, no prometimos cosas, pedimos que bajaran para podernos sentar y conversar y escuchar lo que querían. Costó, pero entramos al edificio", contó Méndez ayer en conferencia de prensa. "Después nos pusimos a limpiar la casa. Dimos testimonio, agarramos un balde, un trapo, y empezamos a ordenar la casa, para poder sentarnos en un lugar donde hubiera un cierto orden". Había piletas, alguna cisterna y muebles rotos, mucho material desparramado por los jóvenes, que sin embargo, de a poco, se fueron sumando a la propuesta. Después que ordenaron la casa, se quisieron bañar. Una vez que terminan los baños, se empezó a compartir la cena. "Habían hecho una parrillita, tenían su asadito preparándose para algún momento de la noche", contó Méndez. Cuando llegó el momento de conversar, se formó una rueda con 12 personas.
"La intención era escuchar y notificarnos de las cosas que nos reclaman y de a qué cosas ustedes se comprometen", dijo entonces Méndez. Los reclamos eran más tiempo fuera de la celda, más actividades deportivas, algún trabajo de huerta, más apoyo al estudio, mejorar la calidad de la comida, tiempo para higienizarse. Los compromisos: ser "obedientes" cuando finaliza el horario de tiempo de patio, cuidar el ambiente y la higiene personal. También pidieron cambiar la ubicación de algunos internos en las celdas, lo que se realizó por esa noche. Cuando terminaron, ya eran como las cinco de la mañana, y de a poco fueron yendo a acostarse.
Como primera prueba en su nuevo cargo, Méndez consideró que el resultado fue "exitoso". Pero no espera que sea la última. "El propio encierro genera dentro del adolescente situaciones conflictivas, y si no hay elementos de distensión lo que voy a tener periódicamente son amotinamientos", señaló.
Las cifras
9 Fueron los jóvenes internos que participaron del amotinamiento. De los 12 que estaban en el Hogar Ser, 3 decidieron no sumarse.
4 Son las horas que duró la negociación de Méndez con los amotinados. El operativo policial se mantuvo durante 7 horas.
Hubo récord de ingresos en este fin de semana
El presidente de INAU, Víctor Giorgi, evitó manejar una fecha concreta para el cierre definitivo del Hogar Ser. "Lamentablemente, en este momento tenemos muy lleno todo el sistema y no podemos efectuar traslados", señaló.
Promedialmente ingresan entre tres y cuatro jóvenes por semana a la Colonia Berro. Sin embargo, durante el fin de semana pasado, hubo 14 ingresos al complejo, lo que equivale prácticamente a lo que ingresa en un mes, según indicó el presidente del sindicato de funcionarios del INAU, Joselo López.
Giorgi, por su parte, informó que actualmente hay unos 160 internos en la Berro, cuando el número habitual es de 150, más otros 100 en Montevideo.
"No queremos manejar fechas (de cierre) porque hay muchachos con penas relativamente largas y otros van a ir egresando", explicó Giorgi.
De todos modos aclaró que el cierre de este hogar en la Berro "no es el final de este modelo, que tiene un gran valor simbólico, pero se refiere sólo a un establecimiento", argumentó. El presidente del INAU también advirtió que este tipo de situaciones de amotinamiento también puede darse en otros locales del instituto.
Ladrones en hogar de Artigas
ARTIGAS JAVIER BERTALOT
En estos últimos días, hubo varios robos en comercios y en viviendas de la capital de Artigas, que han disparado nuevamente la preocupación de los ciudadanos, quienes además reclaman mayor seguridad a las autoridades.
En alguno de esos robos participaron dos menores, de 14 y 17 años, internos del hogar de varones del Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU), por lo que la Justicia dispuso que fueran trasladados a Montevideo.
En el hogar de varones la Policía requisó botellas de whisky, latas de cerveza, elementos de computadoras, objetos cortantes y una mochila, todos estos producto de los hurtos perpetrados por algunos de los internos.
El jefe del INAU local, Sergio Pereira, reconoció que a pesar de la tarea educativa que llevan adelante en el hogar, "es muy difícil controlar a estos muchachos, porque además el régimen del hogar es abierto, y por eso los internos logran entrar y salir sin problemas".
Vecinos del hogar, ubicado en pleno centro de la ciudad, volvieron a reclamar públicamente que se adopten medidas porque perdieron la tranquilidad. "Estamos atemorizados", dicen a la vez que solicitan reserva en su identidad por miedo a que les pueda suceder algo a ellos o a sus hijos.
De madrugada, los jóvenes del INAU escuchan música hasta altas horas; recorren los techos de las casas contiguas, jugando carreras y se meten en las viviendas vecinas para entrar o salir a cualquier hora.
En el hogar de varones del INAU en Artigas había seis jóvenes internados, de entre 10 y 17 años. Dos de ellos fueron trasladados a locales de Montevideo. De los seis jóvenes internos, cuatro están en el instituto por faltas (delitos cometidos por menores).
Méndez es citado a diputados
La polémica en torno a los centros de alta contención del INAU, en particular los del Complejo Berro, rodeó también al nombramiento del padre Mateo Méndez como titular del Instituto de Rehabilitación Juvenil (Interj). Al argumentar en favor de la elección del religioso para dirigir el centro, la ministra Marina Arismendi reconoció que el titular anterior, Carlos Uriarte, no tenía el perfil adecuado. "Yo me siento muy responsable con Uriarte porque es una persona fantástica, comprometida, pero no era el cargo para él. Su condición de abogado especialista en temas de jóvenes, no lo hace un buen líder para trabajar con estos muchachos, ahí fue un error nuestro", dijo Arismendi cuando Méndez asumió formalmente el 15 de agosto pasado. Méndez, entre otras cosas, prometió profundos cambios en la organización del complejo, particularmente en el área de seguridad. Al referirse al carácter de la guardia policial Méndez sostuvo que "no será una figura represiva que se mantenga en conflicto con el adolescente". El diputado colorado Gustavo Espinosa convoca ahora al padre Méndez a la Comisión de Derechos Humanos para analizar la situación del complejo, en particular en las áreas de internación
El País, 28 de agosto

1 comentario:

Anónimo dijo...

No todo lo dicho en esta nota encuadrra en la realidad.Los trabajadores del ser entramos a trabajar,en la tarde posterior al motin por un acuerdo con las autoridades.Este acuerdo fue basado en su totalidad por insultantes mentiras;la peor y mas peligrosa a la integridad de las personas.Se nos informo que se abian echo requizas para la sustracion de puntas y al entrar al api los jobenes alli presentes nos salieron con un palo de metro y medio y una nabaja.
Las autoridades utilizaron funcionarios carneros para poder dar cumplimiento a una tarea que no fue cumplida y la misma podria aver jenerado una citucion que hubiera producido la muerte de los jovenes ya que no nos hubieramos dejado matar.Todo lo que pasa en el hogar pasa porque las autoridades son incopetentes para realisar la tarea por la cual le pagan.siempre se corta el bacalao por el hilo mas fino, los funcionarios que bamos a trabajar. no le mientan a la jente.

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