Guerra a los precios. Los alimentos fueron los que más subieron en enero por la sequía Las acciones del gobierno moderarán la suba de febrero aunque aumentarán UTE y OSE
La suba de precios de enero fue menor a la esperada y, al menos por ahora, se disipó el riesgo de que se disparen las subas de salarios públicos y pasividades. No obstante, los economistas advierten que el riesgo persiste.
El Índice de los Precios al Consumo (IPC) aumentó 0,79% en enero, una cifra que le dio un respiro al equipo económico en su lucha contra la inflación, según la información divulgada ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Sin embargo, el presupuesto que permitiría mantener el consumo de la canasta básica de bienes y servicios de enero fue de $ 23.417, según cálculos del Instituto de Estadística de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración.
Esa canasta incluye alimentos y bebidas, gastos de vivienda, muebles, accesorios y enseres, transporte y comunicaciones, esparcimientos y diversión y otros bienes y servicios.
EVOLUCIÓN. El aumento de 0,79% -prácticamente el mismo que el registrado en igual mes de 2008 (0,78%)-, significó la decimocuarta suba mensual consecutiva del IPC, y fue de un nivel inferior a la proyección de los economistas privados que responden a la encuesta de expectativas del Banco Central (0,9% en mediana).
A su vez, en los 12 meses móviles cerrados en enero, el aumento de los precios minoristas se ubicó en 9,21%, la quinta suba consecutiva bajo esa medición, y la cifra más elevada desde el año terminado en septiembre de 2004.
Para que en el próximo mes el aumento anual de precios se ubique en los dos dígitos, el incremento del IPC en febrero debería ser de 1,65%, lo que es muy poco probable.
En la medición del IPC de febrero jugará a favor del gobierno la baja de combustibles de 6% aprobada ayer (ver nota aparte), la rebaja de la carne (sobre fines de enero, por lo que en parte seguirá pegando el mes próximo) y posiblemente las exoneraciones del IVA a frutas y verduras, pero se darán aumentos de 8% en OSE -ayer se conoció el decreto- y de 2,3% para UTE.
A todo esto, el registro anual continúa en niveles superiores a la meta oficial, que prevé una suba de precios máxima de 7%.
Si se tienen en cuenta los rubros menos volátiles de la canasta del IPC, encontramos que en los últimos 12 meses cerrados a enero la inflación tendencial -sin tarifas, carnes, frutas y verduras- también excede largamente al rango oficial de suba de precios (+9,6% en último año).
La fuerte sequía que afecta al país determinó que casi el 80% de la suba mensual del IPC se explicara por el incremento en el precio del rubro alimentos y bebidas (+2,8%).
El segundo rubro en incidencia en la variación mensual fue cuidados médicos y salud, que en promedio aumentó 2,5%. Este incremento -que se registró a pesar de que el gobierno dispuso que no aumentara en enero la cuota mutual- se dio al influjo de una mayor inflación en servicios odontológicos (5,6%), y en servicio de emergencia móvil (3,4%).
En contrapartida bajaron vestimenta y calzado (-1,2%) y en forma leve transporte y comunicaciones (-0,02%).
analistas. Economistas consultados por El País creen que el riesgo de que la inflación anualizada alcance el 10% y dispare ajustes semestrales de pasividades y salarios públicos, seguirá "latente" por algunos meses más. De todas maneras, la mayoría no recoge en sus proyecciones que se alcance ese guarismo.
Los analistas creen que con las medidas fiscales adoptadas, el gobierno gana tiempo para enfrentar shocks transitorios en precios de frutas y verduras que seguirán altos por la baja producción por la sequía.
Tamara Schandy de Deloitte, afirmó que la suba del IPC en enero es un "muy buen" dato, porque la inflación subyacente "fue muy reducida", de solo 0,3% según sus cálculos.
Para Alfonso Capurro (economista de Cinve y CPA/Ferrere) el dato de enero no fue bueno ni malo, y dijo que "la amenaza del 10% seguirá latente al menos por febrero", ya que la oferta de frutas y verduras no se normalizará de inmediato.
Para Marcelo Sibille de KPMG, el riesgo de que la inflación llegue a 10% seguirá incluso después de febrero "en la medida que los efectos de la sequía sobre la oferta de alimentos sea muy drástica, por lo que no se debe bajar la guardia".
Respecto a las medidas que tomó el gobierno, Mercedes comas de PricewaterhouseCoopers evaluó que "se está ganando tiempo" mientras se aguarda que "operen otros factores como los acuerdos de precios" y se "pueda trasladar a precios, la baja registrada en alimentos y commodities".
Mientras Capurro coincide con que la estrategia del gobierno es "adecuada" al "comprar tiempo implementando medidas transitorias para un shock transitorio", Pablo Moya de Oikos señaló que no es muy optimista respecto a las medidas anunciadas, y agregó: "no vemos un impacto importante en el IPC".
Varios de los consultados creen que para lograr niveles de inflación más bajos se requeriría una moderación en la suba de los salarios y una profundización de la política monetaria, contrayendo la cantidad de dinero disponible.
Para los hogares de menores recursos la suba fue mayor
La presión del incremento de los precios en enero fue mayor para los bolsillos de los hogares de menores ingresos en Montevideo que para el general de la población.
Según el relevamiento del Instituto de Estadística de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración, los precios al consumidor de los bienes que integran el presupuesto familiar de los hogares de Montevideo crecieron 1,19% en enero, por encima del Índice de Precios del Consumo del Instituto Nacional de Estadística que creció 0,79%.
A diferencia de lo que ocurrió a nivel general, en los hogares de menores ingresos todos los rubros excepto transporte y comunicaciones registraron subas.
Los productos que tuvieron mayor incidencia en el incremento fueron los alimentos y bebidas que se encarecieron 2,47% empujado s por la suba de las verduras, legumbres y tubérculos que aumentaron 15,67% y de las frutas que subieron 4,98%, según el Instituto.
A este rubro les siguió esparcimiento y diversión que aumentó 4,39%, muebles y accesorios que aumentaron 0,77% y otros bienes y servicios que se encarecieron 0,79%.
Por el contrario transporte y comunicaciones registró una baja de 0,71%.
El País Digital, 4 de febrero
La suba de precios de enero fue menor a la esperada y, al menos por ahora, se disipó el riesgo de que se disparen las subas de salarios públicos y pasividades. No obstante, los economistas advierten que el riesgo persiste.
El Índice de los Precios al Consumo (IPC) aumentó 0,79% en enero, una cifra que le dio un respiro al equipo económico en su lucha contra la inflación, según la información divulgada ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Sin embargo, el presupuesto que permitiría mantener el consumo de la canasta básica de bienes y servicios de enero fue de $ 23.417, según cálculos del Instituto de Estadística de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración.
Esa canasta incluye alimentos y bebidas, gastos de vivienda, muebles, accesorios y enseres, transporte y comunicaciones, esparcimientos y diversión y otros bienes y servicios.
EVOLUCIÓN. El aumento de 0,79% -prácticamente el mismo que el registrado en igual mes de 2008 (0,78%)-, significó la decimocuarta suba mensual consecutiva del IPC, y fue de un nivel inferior a la proyección de los economistas privados que responden a la encuesta de expectativas del Banco Central (0,9% en mediana).
A su vez, en los 12 meses móviles cerrados en enero, el aumento de los precios minoristas se ubicó en 9,21%, la quinta suba consecutiva bajo esa medición, y la cifra más elevada desde el año terminado en septiembre de 2004.
Para que en el próximo mes el aumento anual de precios se ubique en los dos dígitos, el incremento del IPC en febrero debería ser de 1,65%, lo que es muy poco probable.
En la medición del IPC de febrero jugará a favor del gobierno la baja de combustibles de 6% aprobada ayer (ver nota aparte), la rebaja de la carne (sobre fines de enero, por lo que en parte seguirá pegando el mes próximo) y posiblemente las exoneraciones del IVA a frutas y verduras, pero se darán aumentos de 8% en OSE -ayer se conoció el decreto- y de 2,3% para UTE.
A todo esto, el registro anual continúa en niveles superiores a la meta oficial, que prevé una suba de precios máxima de 7%.
Si se tienen en cuenta los rubros menos volátiles de la canasta del IPC, encontramos que en los últimos 12 meses cerrados a enero la inflación tendencial -sin tarifas, carnes, frutas y verduras- también excede largamente al rango oficial de suba de precios (+9,6% en último año).
La fuerte sequía que afecta al país determinó que casi el 80% de la suba mensual del IPC se explicara por el incremento en el precio del rubro alimentos y bebidas (+2,8%).
El segundo rubro en incidencia en la variación mensual fue cuidados médicos y salud, que en promedio aumentó 2,5%. Este incremento -que se registró a pesar de que el gobierno dispuso que no aumentara en enero la cuota mutual- se dio al influjo de una mayor inflación en servicios odontológicos (5,6%), y en servicio de emergencia móvil (3,4%).
En contrapartida bajaron vestimenta y calzado (-1,2%) y en forma leve transporte y comunicaciones (-0,02%).
analistas. Economistas consultados por El País creen que el riesgo de que la inflación anualizada alcance el 10% y dispare ajustes semestrales de pasividades y salarios públicos, seguirá "latente" por algunos meses más. De todas maneras, la mayoría no recoge en sus proyecciones que se alcance ese guarismo.
Los analistas creen que con las medidas fiscales adoptadas, el gobierno gana tiempo para enfrentar shocks transitorios en precios de frutas y verduras que seguirán altos por la baja producción por la sequía.
Tamara Schandy de Deloitte, afirmó que la suba del IPC en enero es un "muy buen" dato, porque la inflación subyacente "fue muy reducida", de solo 0,3% según sus cálculos.
Para Alfonso Capurro (economista de Cinve y CPA/Ferrere) el dato de enero no fue bueno ni malo, y dijo que "la amenaza del 10% seguirá latente al menos por febrero", ya que la oferta de frutas y verduras no se normalizará de inmediato.
Para Marcelo Sibille de KPMG, el riesgo de que la inflación llegue a 10% seguirá incluso después de febrero "en la medida que los efectos de la sequía sobre la oferta de alimentos sea muy drástica, por lo que no se debe bajar la guardia".
Respecto a las medidas que tomó el gobierno, Mercedes comas de PricewaterhouseCoopers evaluó que "se está ganando tiempo" mientras se aguarda que "operen otros factores como los acuerdos de precios" y se "pueda trasladar a precios, la baja registrada en alimentos y commodities".
Mientras Capurro coincide con que la estrategia del gobierno es "adecuada" al "comprar tiempo implementando medidas transitorias para un shock transitorio", Pablo Moya de Oikos señaló que no es muy optimista respecto a las medidas anunciadas, y agregó: "no vemos un impacto importante en el IPC".
Varios de los consultados creen que para lograr niveles de inflación más bajos se requeriría una moderación en la suba de los salarios y una profundización de la política monetaria, contrayendo la cantidad de dinero disponible.
Para los hogares de menores recursos la suba fue mayor
La presión del incremento de los precios en enero fue mayor para los bolsillos de los hogares de menores ingresos en Montevideo que para el general de la población.
Según el relevamiento del Instituto de Estadística de la Facultad de Ciencias Económicas y de Administración, los precios al consumidor de los bienes que integran el presupuesto familiar de los hogares de Montevideo crecieron 1,19% en enero, por encima del Índice de Precios del Consumo del Instituto Nacional de Estadística que creció 0,79%.
A diferencia de lo que ocurrió a nivel general, en los hogares de menores ingresos todos los rubros excepto transporte y comunicaciones registraron subas.
Los productos que tuvieron mayor incidencia en el incremento fueron los alimentos y bebidas que se encarecieron 2,47% empujado s por la suba de las verduras, legumbres y tubérculos que aumentaron 15,67% y de las frutas que subieron 4,98%, según el Instituto.
A este rubro les siguió esparcimiento y diversión que aumentó 4,39%, muebles y accesorios que aumentaron 0,77% y otros bienes y servicios que se encarecieron 0,79%.
Por el contrario transporte y comunicaciones registró una baja de 0,71%.
El País Digital, 4 de febrero
OSE aumentó un 8% la tarifa
LO QUE FALTABA
Este Martes fue terrible a los datos de la inflación se sumaron los de OSE que aumentó todas las tarifas de agua en un 8%. Cuanto decimos todas nos referimos a las tarifas tanto domésticas, como comerciales e industriales. Según dice el decreto de la dirección del Ente, la empresa se vio obligada a aumentar las tarifas para adecuar los ingresos a las obligaciones de suministro de agua potable y de alejamiento y depuración de aguas servidas.
El consumo doméstico en Montevideo y el interior (exceptuando la zona balnearia de Maldonado) pagarán mensualmente 60,80 pesos de 0 a 5 metros cúbicos; 121,61 de 5 a 10; y luego de 10 metros cúbicos, se continuará cobrando por metro consumido a razón de 12,16 pesos el metro hasta 15.
Los beneficiarios de los planes de emergencia del Ministerio de Desarrollo Social y los titulares de servicios en asentamientos identificados por el Ministerio de Vivienda pagarán un valor fijo mensual de 60 pesos por agua potable y de 96 pesos por agua y saneamiento.
Los jubilados y pensionistas cuyo ingreso sea el único del hogar y consuman menos de 10 metros cúbicos de agua mensuales, podrán gestionar la exoneración de todo pago por el servicio de agua potable y alcantarillado, dice la resolución
La Juventud, 4 de febrero
LO QUE FALTABA
Este Martes fue terrible a los datos de la inflación se sumaron los de OSE que aumentó todas las tarifas de agua en un 8%. Cuanto decimos todas nos referimos a las tarifas tanto domésticas, como comerciales e industriales. Según dice el decreto de la dirección del Ente, la empresa se vio obligada a aumentar las tarifas para adecuar los ingresos a las obligaciones de suministro de agua potable y de alejamiento y depuración de aguas servidas.
El consumo doméstico en Montevideo y el interior (exceptuando la zona balnearia de Maldonado) pagarán mensualmente 60,80 pesos de 0 a 5 metros cúbicos; 121,61 de 5 a 10; y luego de 10 metros cúbicos, se continuará cobrando por metro consumido a razón de 12,16 pesos el metro hasta 15.
Los beneficiarios de los planes de emergencia del Ministerio de Desarrollo Social y los titulares de servicios en asentamientos identificados por el Ministerio de Vivienda pagarán un valor fijo mensual de 60 pesos por agua potable y de 96 pesos por agua y saneamiento.
Los jubilados y pensionistas cuyo ingreso sea el único del hogar y consuman menos de 10 metros cúbicos de agua mensuales, podrán gestionar la exoneración de todo pago por el servicio de agua potable y alcantarillado, dice la resolución
La Juventud, 4 de febrero
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